La respuesta es sencilla: NO . Un auricular nunca puede ser lo mismo que aun audífono, por mucho que entre sus funciones esté la de amplificar el sonido.
Una de las cosas que debe tener en cuenta es que en latinoamérica la palabra audífonos no significa lo mismo que en España . Audífono aquí es lo que conocemos como prótesis auditiva, dispositivos para tratar problemas de audición, etc. En muchos paises latinoamericanos los audífonos son los cascos o auriculares que conocemos aquí.
Los auriculares han sufrido diversos avances tecnológicos, al igual que los audífonos. Aunque muchos audífonos sirvan para poder escuchar música no es la función principal que tienen.
Si lo que una persona quiere es poder ver la televisión o escuchar música sin importar el grado de audición que tengan, los auriculares transmiten ese sonido y además hoy en día los hay inalámbricos. Pero hoy en día, como hemos comentado anteriormente, los audífonos han evolucionado muchísimo y actualmente pueden reproducir esos sonidos de la televisión o de los equipos de audio directamente en los oídos. Eso sí, están basados en una serie de configuraciones según la pérdida auditiva del paciente , por lo que además de poder escuchar estas fuentes de sonido lo hacen protegiendo su audición y adaptado a sus condicionantes.
En ningún caso un auricular debe ser una alternativa al audífono . Aunque actúen como amplificadores de sonido no van a tener en cuenta el grado de pérdida ni la frecuencia y si se utilizan a un volumen elevado las consecuencias a largo plazo pueden ser nefastas.
Al no estar personalizados los auriculares, a diferencia de los audífonos, no pueden ayudar a los usuarios a captar y personalizar los sonidos a su alrededor y es que la sordera no se soluciona con un incremento del volumen .
Por todas estas cosas, ante la pérdida auditiva, recomendamos acudir a un especialista . No debemos autorecomendarnos los amplificadores de sonido (auriculares) en los casos que necesitemos una prótesis que nos ayude en el procesamiento de dichos sonidos.
Esta es la gran diferencia entre un auricular y un audífono y por ello nunca pueden ser lo mismo.