Los audífonos, con los cuidados adecuados y la preocupación por su estado necesaria, pueden incrementar su vida útil notablemente.

Se puede alargar su vida útil con tres palabras: mantenimiento, limpieza y conservación/guardado del mismo . Aprender a cuidar un dispositivo especialmente delicado y que puede deteriorarse si no se tiene el debido celo es esencial.

El precio de los dispositivos depende de la calidad y tecnología que tenga el audífono y por eso hay que tener un cuidado especial puesto que se trata de algo que no sólo ayuda a las personas con pérdida auditiva sino que es un elemento frágil.

Limpiar un audífono no es un proceso complicado , y se puede realizar de forma sencilla en la mesita de noche antes de ir a dormir. Con este pequeño gesto evitaremos una limpieza más profunda que se debe realizar de forma cíclica cada semana. No se recomienda dejar de limpiar el audífono durante más de una semana.

En la limpieza el uso del cepillo y del bastoncillo es esencial para eliminar la cera acumulada, pero además debes evitar soluciones quimicas con alcohol . En tu centro auditivo disponen de cepillos específicos para la limpieza del dispositivo. No se te olvide, a la hora de limpiarlo, sacar la pila de su compartimento y limpiarlo.

Con la extracción de la batería , utilizar un pañuelo o trapo como el de las gafas humedecido en solución de limpieza para limpiar el audífono y dejarlo secar es un proceso útil para mantenerlo.

Hay audífonos como los retroauriculares que deben tener una limpieza del molde especial . Una vez que se retira el molde del dispositivo es coveniente limpiarlo con agua tibia y poco jabón y después dejarlo secar.

Otros de los cuidados que podemos darle al audífono es guardarlo en el estuche con el que suelen venderlo los centros auditivos . Así, evitas daños. Evita utilizar tu dispositivo para la audición cuando haya unas temperaturas y humedad altas, cuando sean días lluviosos y también acuérdate de no dejarlos bajo los rayos solares.

Nuestro consejo para cada día es que si puedes dejes en la mesilla de noche el audífono con el compartimento de la batería abierto , mejor.

Normalmente los audífonos suelen disponer de un filtro anti cerumen que actúa como protector en el auricular . Así se evita que la cera llegue a esa parte del audífono y que se tapone. El cambio de estos filtros lo suele hacer el centro audiológico correspondiente porque son de muy reducido tamaño y no es sencillo hacerlo en casa.